Quantcast
Channel: Migas en la mesa
Viewing all articles
Browse latest Browse all 56

NARANJAS DESHIDRATADAS [Recetas para la crisis]

$
0
0

Hoy toca chapa.

Entrada para concienciar, lo siento! Me ha salido la vena.

Vamos a evitar a toda cosa cargarnos el planeta, a ver si es posible! Que digo yo que aprovechando que tenemos una crisis del tamaño de un planeta grande, como poco, podemos hacer algo por esa otra crisis que es la que de verdad importa.

Porque el dinero, vaquitas, os puede importar lo que os apetezca a cada una de vosotras, pero si necesitamos 1,5 planetas iguales a la tierra para satisfacer nuestras necesidades apetencias de consumo... la cuestión no va a depender de que nos quiera importar o no.

Si alguien desconfía de mi chapa, puede ver la mega-chapa contrastada y documentada del Living planet report y si le queda estómago, pues ya nos cuenta...

Así que vamos a ser buenos y a aprovechar recursos y de paso, ahorramos con estas sugerencias:

Reutilizar el agua de la ducha.
El agua nunca sale caliente desde el comienzo. El primer minuto de agua fría, se puede guardar para regar las plantas. No es cuestión de usarla para hacer sopa, pero las plantas no se quejarán y ahorraremos unos 600 litros de agua al mes. Otra opción: llenar el cubo de la fregona.

Las salsas, a un botecito.
Se acabó eso de fregar las fuentes de horno y sartenes tirando [tirar! pensadlo bien] los restos de salsas y fondos. Esto bañando unas patatas, un plato de pasta o un arroz, o incluso en un hojaldre luego enrolladito y horneado, es una maravilla, y un aprovechamiento estupendo.



Probemos cosas nuevas. 
Hay alimentos muy económicos como la soja texturizada, que dan mucho juego. También podemos utilizar arroz o patata como base de hamburguesas vegetales, que nos salen estupendas y muy baratitas. Es irresponsable comer carne y pescado sin parar [NO soy vegetariana, es cuestión de ser responsables con el entorno], hay que mirar con cariño a legumbres, cereales y verduras y hacerles un poco más de caso. Son más sostenibles.

Reciclemos.
Hay talleres de reciclaje hasta por Internet.
Las anillas de las latas sirven para hacer pulseras, cinturones y hasta bolsos.
La ropa vieja se puede tunear y reaprovechar, o reconvertir en pantallas de lámparas, bolsos, alfombras...
Las latas de atún y las hueveras son joyeros fantásticos.
Los bricks se convierten en originales monederos.
Demos una oportunidad a todas estas cosas que todavía sirven, y dejemos de ir por la vida uniformados con la misma ropa, los mismos bolsos y complementos, seamos diferentes!

Regalemos.
Magdalenas. Bizcochos. Galletas de canela. Bundt cakes. Cake-pops. Tartas de tres chocolates. Hojaldres rellenos. Galletas con chips de chocolate. Panes. Macaroons. Piruletas. Helados. Trufas. Bizcochos de plátano. Tartas de avellanas. Bombones.

Dejemos de consumir cosas absurdas que no sirven para nada, salvo para ocupar espacio y generar basura [adiós a los llaveros de "Estuve en Villalavirgen y me acordé de ti", las camisetas horteras que acaban limpiando cristales, las figuritas de porcelana, los dedales con foto de la catedral del pueblo de tus tíos, las cucharitas de adorno con un relieve de la Virgen del Turista Pardillo, y un largo etcétera de despropósitos que todos, sin excepción, hemos comprado alguna vez].



INGREDIENTES

Naranjas
[Horno]
[Tiempo]

MODUS OPERANDI

Las naranjas deshidratadas son lo más sencillo que os podáis imaginar.

Solo necesitamos un poco de pulso o una buena mandolina para cortar rodajas de naranja lo más finas y uniformes que podamos. Ya está. Esto era lo difícil.

Colocamos todas las rodajas sobre una bandeja de horno. Las horneamos a 80º durante una hora, al cabo de la cual, damos la vuelta a todas y cada una de las rodajas, y las volvemos a meter a 80º, esta vez dos horas.

Si tenemos posibilidad de hacerlo [yo no la tengo] al darles la vuelta las pasamos a una rejilla. Esto es porque en el papel de horno puede quedar humedad y en la rejilla van a secarse mejor. Si las ponemos aquí desde el principio, se pueden deformar, hay que esperar a que hayan endurecido un poco.

Según el grosor del corte, tardarán más o menos, las vamos vigilando.

Estas naranjas se han deshidratado tal cual, sin azúcar y sin añadidos de ningún tipo. Son ligeramente amargas, porque así es como me gustan a mí. Sobre todo si después las baño en chocolate negro.

¿Qué hago si no las quiero amargas?

Plan A: Naranjas sin amargor. 
Pon una cacerola con abundante agua, y blanquea las rodajas unos 5 minutos para que suelten el amargor. Cuidado con no pasarte! A partir de aquí, las deshidratamos igual que si no se hubieran blanqueado.

Plan B: Naranjas dulces
Se pueden confitar primero, y deshidratar después. Para ello, preparamos un almíbar fuerte con el doble de azúcar que de agua, y cocemos las rodajas de naranja en este almíbar durante una hora. A partir de aquí, las deshidratamos, pero teniendo en cuenta que tardarán más tiempo en secarse.





Viewing all articles
Browse latest Browse all 56

Trending Articles